miércoles, 8 de junio de 2011

La Lupa culpable

***
Ya la pupila cansada
se queja en tono impaciente
que está borrosa la lente
de una lupa desdichada.

Y aún la letra emborronada
media luego en la cuestión
culpando a la imprecisión
del artefacto maldito.

¡Y al pobre cristal contrito
ni el pulso otorga razón! ...
(Horace)
***
Moraleja: Tendemos a culpar a los demás de nuestros propios defectos

1 comentario:

  1. ¡Qué razón tienes, Horace! Debemos aprender a meditar sobre nuestros propios defectos.
    Me alegra verte de nuevo.
    Un abrazo.

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